Retomando una tradición. Cuidado de manos.

No sé si os pasará a vosotras y vosotros que a veces me olvido de realizar ciertos cuidados en los que normalmente suelo tener una rutina. Y es que desde hace un mes y algo, no se qué me ha dado en la cabeza que no me cuido las manos como debería. A consecuencia de esto se me han resecado el doble y me han comenzado a salir padrastros -no sé cómo los llamaréis vosotros en casa, pero son estos pellejitos que salen alrededor de las uñas y son, a veces, muy molestos-. Y yo como soy así de especial no puedo dejar de arracármelos y morderlos, si ya sé que es un vicio horrible, pero es que no lo puedo evitar!!!

Así que he decidido que ya es hora de volver a retomar mi tradición y contaros de paso cuál es. No sé si recordaréis que hace un tiempecillo os hablé de unas cremas para las manos de Avon y es que yo con esas cremas realizo un ritual practicamente todas las noches. ¿Que cuál es? Pues os lo cuento ya...

Lo que yo hago es coger la crema de glicerina, que es la de la botellita azul y me embadurno los dedos con ella una hora o dos antes de dormir. Y si, antes, que sino pringamos toda la cama, experiencia propia :P Pero  a ver que tampoco me lleno la mano eh! Lo hago menos de la mitad del dedo, o sea, más o menos desde la uña hasta la primera articulación. Y así lo dejo hasta que la piel absorba muy bien la crema y consigo reducir todos esos pellejitos e incluso no tener.

Por hoy siento no poder extenderme más, pero tengo un montonazo de cosas por hacer y si a la noche veo que tengo un poquito de tiempo adelanto algún post, porque algo tan cortito y sin fotos me sabe a poco y nah. Un beso y ya sabéis que podéis comentar o seguir el blog. Chao!